7 conductas de los equipos resilientes #infografia

Tanto en nuestra vida personal como en la profesional nos hemos encontrado con personas capaces de afrontar dificultades y sobreponerse a las mismas de manera asombrosa. A la mente vienen nombres de deportistas famosos como el tenista Rafa Nadal o la piloto María de Villota, quienes superaron admirablemente las adversidades en momentos complicados. Pero seguro que, sin ir muy lejos, en nuestro trabajo o familia, podemos encontrar a este tipo de personas que se enfrentan a diario con grandes problemas de los que salen incluso fortalecidos. Esa capacidad es la “resiliencia” que, según la RAE, es “la capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas”.

Una capacidad cada vez más deseada por las empresas tanto para los profesionales que trabajan individualmente como para los que forman parte de un equipo. La resiliencia es de vital importancia para que las empresas sean capaces de reponerse de situaciones complejas o disruptivas, como por ejemplo una crisis. Las actuales condiciones del entorno empresarial, tan competitivo y cambiante, convierte a los equipos resilientes en imprescindibles para las organizaciones. Su capacidad de adaptación y de convertir los problemas en oportunidades es tal, que generan un gran valor a sus organizaciones y clientes, según se desprende de un artículo publicado en Equipos y Talento y basado en el libro de Richard Citrin, «Las ventajas de la resiliencia: deja de lidiar con el estrés y encuentre su resiliencia» donde se habla de los hábitos de este tipo de equipos. He reunido en la siguiente infografía las 7 conductas de los equipos resilientes:

Los características de una persona resiliente se pueden y se deben trasladar a los equipos. La resiliencia es algo que se trabaja y se entrena y se hace posible en un ambiente de trabajo donde reine la seguridad psicológica. Los resilientes destacan por ser receptivos a nuevas ideas, ser muy disciplinados y tener un gran sentido de la responsabilidad, capacidad de afrontamiento y de concentración, y muy importante, creer que se puede aprender de todas las experiencias, tanto de lo positivo como de lo negativo. Tienen además sus objetivos muy definidos, lo que les ayuda a poner el foco en los resultados, sin entorpecerse unos a otros pero remando todos en la misma dirección.

Otro de los hábitos de los equipos resilientes es la baja rotación. Los miembros de estos equipos tienden a crear vínculos personales sólidos a lo largo del tiempo y tienen un efecto directo sobre su trabajo haciéndoles más productivos.  La forma de actuar de estos equipos frente a un problema de trabajo o personal es afrontarlo directamente sin escaparse de ellos. Y tienden a convertir las dificultades y lo negativo en desafíos. Para tener las capacidades más demandadas, dedican parte de su tiempo a desarrollarlas y entrenarlas, principalmente trabajando la capacidad de pensamiento crítico, la seguridad en sí mismos y la capacidad de comunicarse, para ser capaces de ofrecer respuestas ágiles a los problemas.

Uno de los ejes y fortalezas más importante de las empresas son sus empleados. Todas estas actitudes y capacidades personales trasladadas a los empleados en el ámbito empresarial pueden fortalecer a las empresas. Si existe compromiso por parte del líder, creando un ambiente seguro, donde se puedan expresar libremente las opiniones sin temor a represalias, donde expresar ideas y emociones, donde se sientan valorados y felices, el resultado serán equipos eficaces y comprometidos que obtendrán mejores resultados para la empresa.

Estas son las 7 conductas de los equipos resilientes:

1. Practican la cultura de la seguridad psicológica en el trabajo
2. Tienen sus objetivos muy definidos
3. Baja rotación de los miembros del equipo
4. Tienen líderes con la cabeza fría
5. No huyen de los problemas
6. Lo negativo lo convierten en un desafío
7. Cuentan con las competencias más demandadas