Google ya no elimina las cookies: ¿Cómo afecta a los anunciantes?
Google nos tiene locos. Cada poco tiempo revela nuevas funciones que desatan la confusión entre creadores, como ha ocurrido recientemente con las AI Overviews. Las cookies de terceros tampoco se escapan de los planes de Google. Durante años, Google nos ha hecho creer que las eliminaría y ahora resulta que no. ¿En qué quedamos?
Que Google es la dueña y señora de los buscadores a nivel mundial nadie lo duda. De lo que si dudamos en ocasiones los creadores de contenido digital es de las idas y venidas de las imposiciones que afectan directamente a nuestro trabajo.
Las cookies son toda información que recopilan webs externas que visitas y que permiten personalizar la experiencia de los usuarios durante la navegación. Es el caso de las cookies de terceros. Google llevaba años queriendo deshacerse de este tipo de recopilación de datos de los buscadores que gestionan la privacidad de los usuarios.
Dicho esto, es necesario conocer por qué Google quería eliminar las cookies de terceros. El principal motivo era para proteger la privacidad de los usuarios dada la presión de sobre la regulación de la misma y también para evitar que terceros se beneficiasen de la información de los usuarios, sobre todo para uso en publicidad.
Google básicamente quería reducir el rastro de información que dejamos cuando navegamos por su buscador, pero ahora estas cookies seguirán estando presentes. Google no ha tenido pérdidas en Ads y ha recuperado casi el 90% de la inversión en publicidad gracias al API de Privacy Sandbox. Esta extensión de Google protege la privacidad del usuario sin perjudicar a los anunciantes. Ahí está la clave del giro de guion, que Google seguirá ganando sin perjudicar, em exceso, la privacidad y los derechos de los usuarios.
¿Afecta a los anunciantes la decisión de no eliminar las cookies?
Los anunciantes no estaban de acuerdo con la eliminación de cookies de terceros por miedo a perder el control completo de los datos de los usuarios. Sin embargo, el cambio de rumbo de Google de mantenerlas ha propiciado que los anuncios se adapten a nuevas formas de recopilar datos gracias a herramientas como la publicidad contextual para ayudar a segmentar a la actividad de los usuarios porque uno de los inconvenientes si se llegan a eliminar sería la dificultad de los anunciantes para segmentar la audiencia con la consiguiente pérdida de efectividad.
En general, para la industria de la publicidad es una buena noticia que Google mantenga las cookies de terceros. Ahora bien, una de las cuestiones que me preocupan sobre el uso de las cookies es la escasa preparación del entorno publicitario para operar sin rastrear.
De todas maneras, las empresas de publicidad deben seguir encargándose de velar por la privacidad de los usuarios y que estos sean su prioridad porque las regulaciones de los datos personales van en aumento y estoy seguro de que en un futuro cercano se implantarán otras medidas mas restrictivas y quien primero tenga la solución para aumentar la eficacia de publicidad digital minimizando la intromisión de las cookies.
En definitiva, esta decisión no afecta directamente a los anunciantes, pero sí los obliga a estar alertas ante el incierto futuro que plantea Google a medio plazo.
