¿Son fiables los fondos Next Generation de la UE?
La Unión Europea (UE) ha lanzado una de las iniciativas más ambiciosas de su historia con los fondos Next Generation EU, destinados a la recuperación económica tras la pandemia. Con un presupuesto de 750.000 millones de euros, estos fondos buscan impulsar la transición ecológica y digital y fortalecer la resiliencia de los Estados miembros. Sin embargo, me pregunto si son realmente fiables estos fondos, ya que parece que todo alrededor de nosotros está financiado a través de estas ayudas.
De todos modos, los fondos NG de la Unión Europea ofrecen una garantía segura para los Estados miembro dada la alta fiabilidad y transparencia en la forma de gestionar las adjudicaciones. De esta manera, a UE ha establecido mecanismos estrictos de supervisión y control para asegurar que los fondos se utilicen de manera adecuada. Cada Estado miembro debe presentar un plan detallado de cómo se gastarán los fondos, y estos planes son evaluados por la Comisión Europea.
Por otro lado, estas subvenciones auguran un impacto positivo en la economía porque estos fondos están diseñados para financiar proyectos de infraestructura, energías renovables y digitalización, y se espera que estos fondos generen empleo y fomenten el crecimiento económico a largo plazo. Además, la inversión en tecnologías verdes y digitales puede posicionar a Europa como líder en estos sectores, sin olvidarnos del apoyo a la cohesión social, puesto que estos fondos NG no solo están destinados a la recuperación económica, sino también a reducir las desigualdades sociales y regionales entre los 27, invirtiendo en educación, salud y servicios sociales, con el objetivo a largo plazo de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos europeos.
La desigualdad también existe en los Next Generation
Pero a pesar de las buenas intenciones de la Unión, el riesgo siempre está ahí y más aún cuando el capital mediante el cual se financian estas subvenciones es muy holgado, como es el caso. Uno de los riesgos a los que se enfrentan los receptores de estos fondos (recordemos que España es uno de los países que más dinero recibe de la UE de los Next Generation) es la mala gestión de los mismos porque la eficacia de los controles dependerá en gran medida de la voluntad política y la capacidad administrativa de cada Estado miembro, claro está.
Al comienzo de este artículo dije los fondos Next Generation están destinados, en parte, a combatir la desigualdad entre los 27. Bien. Pues otro de los riesgos más candentes de este tipo de subvenciones en la desigualdad en la distribución, ya que algunos países podrían beneficiarse más que otros, lo que podría aumentar las desigualdades, ya existente, dentro de la propia UE. Sin olvidarnos, por supuesto, que las regiones más desarrolladas tienen más capacidad para presentar proyectos viables, aumentando así dicha brecha entre Estados.
Y, por último, y como se suele decir, no menos importante: que estos fondos que recibimos todos los Estados dependen de la deuda, es decir, de los bancos centrales. En primera instancia no es un tema que nos repercuta en exceso a corto plazo, pero mucho cuidado con sobre endeudarnos para recuperarnos “inmediatamente” de una pandemia de cinco años atrás. La deuda conjunta nos puede salvar los años venideros, pero debemos prestar atención a los indicadores que nos advierten de nuestra capacidad financiera como Estado.
¿Crees que los fondos Next Generation EU son una herramienta fiable para la recuperación económica y social de Europa? ¿Qué opinas sobre la distribución de los fondos entre países miembros?