El nuevo Twitter de Elon Musk
Llevamos varias semanas pendientes de este momento. Las noticias ya confirmaban que el acercamiento de Elon Musk a Twitter no eran un sueño sino una realidad a muy corto plazo. Hoy ya podemos confirmar que ha comprado la que cataloga su “red social favorita”.
Durante la pandemia del Covid-19, la plataforma vio como algunos de sus anunciantes no apostaban por ellos. Esto llevo a registrar pérdidas en la compañía. Sin embargo, con el confinamiento el número de usuarios diarios que accedían a la aplicación, incrementó de manera significativa con un promedio de 186 millones de internautas. En 2020 se registraron pérdidas por 1.228 millones de dólares en apenas tres meses. De esta forma, Twitter registraba su segundo trimestre consecutivo en rojo. A cifras de 2021 había 353 millones de usuarios activos en la aplicación y se prevé que vayan aumentando con el paso de los años.
El CEO de Tesla y SpaceX ha acordado la compra de una de las principales redes sociales del mundo por más de 44.000 millones de dólares. Él es uno de los usuarios más activos de la plataforma. Además, habla sobre diferentes temas en ella, muy variopintos: Anuncios empresariales, enigmáticas reflexiones, memes, disputas públicas y un largo etcétera. Cuenta con 84,7 millones de seguidores y tiene claro que de su mano vendrán nuevas formas de entender esta aplicación.
Los acontecimientos han ido muy deprisa. Parece que Elon Musk quería convertirse rápidamente en el máximo accionista de Twitter y hacer de esta una red social a su gusto. Existe un gran ambiente de incertidumbre porque nadie sabe qué es exactamente lo que planea hacer. Solo está claro que la transición de una empresa cotizada a privada conlleva cambios significativos en la administración y forma de trabajo. Musk asegura que la compra “no es para ganar dinero” sino que su única misión es “tener un espacio de libertad de expresión que sea inclusivo”.
Ahora solo queda ver si es capaz de desbloquear todo el potencial que ha asegurado que la red social tiene y habrá que estar pendiente de las modificaciones que prevé realizar. Es complicado definir las nuevas actualizaciones de la plataforma, pero es cierto que algunas están claras porque ya lo ha anunciado él públicamente. Además, durante este tiempo, que ha mantenido en la sombra los movimientos que quería realizar, ha estado haciendo encuestas para preguntar a las personas respecto a ciertos temas importantes. De alguna forma, querría analizar la opinión popular en algunos temas que generan controversia.
Uno de los asuntos en los que más comprometido se ha mostrado ha sido en la ‘libertad de expresión’. El 25 de marzo lanzaba una encuesta a sus seguidores donde preguntaba: “¿Crees que Twitter se adhiere rigurosamente al principio de libertad de expresión?”, un 70,4% respondía que no. Él mismo ha dicho que debe existir una completa libertad de expresión y ha declarado que es importante que las personas puedan hablar libremente a través de sus perfiles siempre bajo el marco de la Ley. Este es uno de los puntos que más preocupa a los trabajadores porque, de momento, se desconoce si echará por la borda todos los esfuerzos realizados en los últimos años respecto al desarrollo de políticas y sanciones para el discurso inapropiado.
Se ha mostrado siempre muy critico con las políticas de moderación en las que Twitter está sumergido. Es más, a comienzos del 2021, debido a el asalto al Capitolio, la cuenta de Donald Trump fue suspendida por el “riesgo de futuras incitaciones a la violencia”. Tanto esto como la denuncia organizada de los perfiles en esta red para provocar el cierre del perfil del presidente de Estados Unidos del momento, considera que fueron acciones que van en contra de la libertad de expresión.
El mundo de los algoritmos y códigos es bastante arduo de entender. Musk se adelantaba a los acontecimientos. El 24 de marzo preguntaba si los usuarios consideraban que el algoritmo de la plataforma debía ser un código abierto, es decir, si se tiene que mostrar que se ha hecho cualquier cambio en un tuit. De tal forma que todo el mundo pueda ver que no hay manipulación, ya sea algorítmica o manual. Toda esta problemática se debe a que en los últimos años se ha hablado mucho de la “shadow banning”. Consiste en limitar de forma artificial la visibilidad de los tuits de cuentas consideradas problemáticas para las políticas de moderación de la red social.
Elon Musk asegura que la libertad de expresión es la base de una democracia para que esta funcione y afirma que: “Twitter es la plaza de la ciudad digital donde se debaten asuntos vitales para el futuro de la humanidad”.
Uno de los puntos fuertes será intentar eliminar los bots de spam de la plataforma y autenticar a las cuentas reales. Decía en una entrevista: “Derrotaremos a los bots de spam o moriremos intentándolo”. En Twitter ocurre, normalmente, que los ‘trending topics’, es decir el contenido viral, se encuentra respaldado por miles de cuentas automatizadas. Este es uno de los grandes problemas que arrastra la aplicación desde que salió a la luz. Cuando hay un asunto importante a nivel mundial, miles de cuentas spam crean tuits para generar una opinión, pero realmente detrás de ellas no hay nadie. Simplemente máquinas. Esto es uno de los aspectos que Musk se ha comprometido a mejorar una vez que llegase al mandato. Asimismo, quiere autenticar a todos los humanos.
¿Será tan fácil eliminar las cuentas spam? ¿Qué estrategia habrá que seguir para demostrar que detrás de los perfiles se encuentra una máquina? Sin duda, este será un tema complejo en el que el equipo de Twitter tendrá que trabajar profundamente para paliar la crisis del spam que existe en la red social.
También hay cambios muy positivos y esperados. Una de las cosas que más ha gustado a los internautas ha sido que anuncien que habrá un botón de editar. Ya eran muchas las personas que se manifestaban en la plataforma pidiendo que dejasen cambiar los tuits una vez se habían publicado. Algo que no ha ocurrido nunca desde su creación. Esta vez parece que el público ha hablado y se llevará a cabo. Asimismo, se ampliarán los caracteres, dejando que los tuits sean más extensos de lo que son hoy en día.
Por ahora, palabras al aire. Elon Musk ya ha conseguido el objetivo que perseguía: ser el mayor accionista de Twitter. Ahora, por tanto, queda un largo trabajo por delante y, sobre todo, habrá que ver si todas las acciones que tiene previstas, podrán ser ejecutadas. De momento, intriga, dudas y muchas incógnitas que solo se irán resolviendo con el paso del tiempo.